2011
Has tus conjuros, “alma bella”,
vengo del futuro y no podemos evitarlo.
Sí, soy un arrogante de mierda, un cretino inmoral,
y no haré donativos, ¿me entiendes? ¡Ni uno más!
Y no me importa ya romper tu corazón (no tienes).
Y ése asunto de dar ánimos, ¡olvídalo!
Caigo
Sí, estoy empeorando.
Y no, no estoy nada cómodo.
Es una pena que este mundo no acabe hoy,
mi único aliciente, sinceramente, es no durar por siempre.
Has tus conjuros, “alma bella”. Sigo cayendo
por un precipicioooooo...
—Has llegado sanito —me dices.
Metes la mano dentro de tu blusa y te acomodas el sostén.
—Gracias, que detalle.
R.
Creo que tu poema refleja una tristeza vestida de furia o será al revés?
ResponderEliminarMuy bueno, me encantó leerte.